lunes, 29 de abril de 2013

La Rosa

Rosa de nieve,
qué blanca eres
y qué tan singular
que tú
eres la flor
que huele 
a otra flor.

Sí, pálida florecilla,
tú eres la flor
que huele
a su amiga,
la vainilla.

Qué tan singular serás
que tu piel
se me clava
en las espinas.

Y sangro yo
y no tú.

Pero qué más da,
si puedo oler esa flor;
esa rosa
que huele 
a vainilla.


Experimento con el verso libre por motivo del Día de San Jorge. Regalo para Sandra.